Comprar casa en Menorca
Uno de los aspectos que diferencian más a Menorca del resto de las Islas Baleares, además de su belleza y sus mágicas playas, es el hecho de la protección del terreno. A diferencia de Mallorca, en Menorca se ha limitado considerablemente el territorio menorquín y no se deja construir así como así en cualquier lugar, siendo el campo y sus terrenos, uno de los sectores más protegidos.Isabel Petrus, gerente de la empresa Casas En Menorca y con más de 30 años de experiencia en este sector, explica que “el principal consejo que damos a la gente que viene de fuera de la Isla para comprar casa en Menorca es que se deje asesorar por un agente inmobiliario porque tienen que ir con mucho cuidado porque muchos terrenos no son edificables porque existen muchas restricciones y ese tipo de información la puede conseguir fácilmente una empresa como la nuestra”. Otro servicio que ofrecen las inmobiliarias es “comprobar que los pagos como el Impuesto de Bienes e Inmuebles o los de comunidad estén al día en las viviendas que se compran ya que si no lo están son responsabilidad del nuevo comprador”.
Actualmente el mercado se encuentra en un momento óptimo para comprar tras la crisis económica ya que ha afectado considerablemente al precio de la vivienda en España y los precios han bajado considerablemente. En este sentido, en Menorca este 2015 ya se ha visto una ligera mejoría que ha propiciado que los precios empiecen a subir de nuevo por lo que antes de que se disparen es una buena ocasión de adquirir una vivienda.
Las casas que están cerca del mar son las más cotizadas y las más caras porque existe la Ley de Costas que prohíbe, desde hace más de 20 años, construir cerca del mar. Es una medida que se tomó a partir de la proliferación de viviendas en primera línea y que se intentó frenar para mantener el encanto de la Isla. Las viviendas en los principales núcleos de la Isla, Mahón y Ciutadella, son más asequibles, mientras que las viviendas de campo con terreno y las que están en urbanizaciones turísticas tienen un precio más alto.
A la hora de adquirir una vivienda, explica Isabel Petrus, “si se trata de una casa de segunda mano los compradores tienen que pagar el Impuesto de Transmisión Patrimonial que es el 8% del precio de la venta si es menos de 400.000 euros. Si el precio es más alto, el tanto por ciento sube”. Así mismo existen también los costes de las tasas de Notario y la Inscripción en el Registro de la Propiedad. Si las casas son nuevas se paga el Impuesto de Valor Añadido (IVA) que es un 10 por ciento más el Impuesto de Actos Juridicos Documentados que es el 1,2 por ciento. También tienen que abonar la cantidad de Notario y de la Inscripcion en el Registro de la Propiedad. Así mismo, toda persona extranjera necesita tramitar el NIE, Número de Idntificación Fiscal para extranjeros ya que es obligatorio para poder comprar una vivienda en España.
La empresa Casas en Menorca, por ejemplo, se encarga de tramitar este tipo de papeleo.
Dino Gelabert Petrus